Redacción Sentido Común
Un león blanco murió durante una inspección realizada por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en el zoológico de Culiacán, Sinaloa, en medio de denuncias por presunto maltrato animal. En redes sociales circularon imágenes del felino en estado de extrema desnutrición y abandono, lo que generó indignación entre activistas y ciudadanos, quienes exigieron acciones inmediatas de las autoridades.
Durante la visita, Profepa constató que el animal vivía en condiciones deplorables: en una jaula pequeña, sin atención veterinaria y rodeado de excremento. Ex empleados y organizaciones de protección animal señalaron que la situación del león era conocida desde semanas atrás, pero no se actuó a tiempo para salvarlo. La muerte del felino ha puesto en la mira la gestión del zoológico y la falta de protocolos para garantizar el bienestar animal.
Ernesto Zazueta, presidente de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM), denunció que la administración actual ha desmantelado programas clave de conservación y prescindido de especialistas en fauna silvestre. Además del león blanco, se reporta que otros animales como tigres, chimpancés y lobos mexicanos también presentan signos de deterioro físico, lo que ha encendido las alarmas sobre el futuro del recinto.