Luis Rubén Maldonado Alvídrez
Sin duda alguna lo logró: Maru Campos comunicación desde el poder con total contundencia un mensaje político que hace eco en las esferas del poder, dentro del PAN y el PRI y especialmente en todas las facciones diversas de Morena.
“El futuro de Chihuahua no se negocia, ni se entrega, por lo que trabajará al límite de sus fuerzas y capacidades para consolidar su proyecto”. ¿Así o más claro? Esto por un desánimo contagiado en los partidos que la cobijan (PAN y PRI), así como por las malas entrañas de quien le juraron lealtad al peor gobernador de la historia de Chihuahua: Javier Corral.
Un mensaje contundente y estructurado de manera magistral para quienes saben leer entre líneas: por una parte se puede entender que trabajará para consolidar su proyecto de gobierno, así como el político, de entregar el mando del Palacio de Gobierno a alguna persona que garantice el triunfo electoral en el 2027. Ante tal aseveración, fue inevitable observar la sonrisa de la dirigente estatal panista Daniela Álvarez.
“A lo largo de este recorrido, he sido calumniada y atacada personalmente. Siendo alcaldesa, resistí el gas lacrimógeno en las puertas de Palacio Nacional, por manifestarme para exigir fondos para la seguridad, y la embestida de la estructura oficialista por pensar diferente”.
Además, recordó además que resistió una persecución política orquestada por Javier Corral, quien buscó satisfacer obsesiones personales y políticos, sin olvidar que se fraguaron algunos con destacados panistas y con Juan Carlos Loera como aliado del entonces (de lamentable desempeño) gobernador Javier Corral. Recordó que esos desafíos los superó gracias al cobijo de los chihuahuenses.
Este informe deja claro otro aspecto: Maru consolidó la narrativa oficial con mayor orden y mejor estructura, para tener la mejor comunicación de lo que va de su mandato.
La comunicación efectiva es fundamental para cualquier líder que aspire a ejercer un poder legítimo y duradero. Sin embargo, comunicar con contundencia desde el poder puede ser un desafío complejo. La comunicación contundente es esencial para establecer confianza, claridad y credibilidad. Cuando los líderes comunican de manera clara y directa, pueden: Establecer una visión compartida y objetivos comunes, inspirar y motivar a sus equipos, resolver conflictos y malentendidos, tomar decisiones informadas y efectivas.
El informe de Maru Campos, presentado en la capital del estado de Chihuahua, cumple con esos puntos. Ojalá y esas directrices comunicacionales, hoy marcadas por la campaña del tercer informe, sean una apuesta a largo plazo.
Cabe mencionar, que esta estrategia “Cuenta Conmigo” establece un tono abierto y transparente, que permite a la mandataria chihuahuense, crear un ambiente en el que se fomente la comunicación abierta y honesta.
También promueve la escucha activa, tan olvidada, en múltiples ocasiones por los gobernantes. Le sumo que es clara y concisa, es decir, evita la ambigüedad y la confusión.
Es cuidadosa, al utilizar un lenguaje inclusivo y respetuoso hacia todas las personas y grupos.
Se percibe auténtica y vulnerable, al compartir sus propias experiencias y emociones que permite establecer una conexión más profunda con su audiencia.
Maru Campos ayer, desde el poder, dio una muestra contundente de lo que se debe hacer bien en materia de comunicación política desde el poder.
ESPRESSO COMPOL
Comunicar con contundencia desde el poder es un desafío complejo que requiere habilidades y estrategias efectivas. Los líderes que pueden superar los obstáculos y comunicarse de manera clara, abierta y auténtica pueden establecer una conexión más profunda con su audiencia, inspirar y motivar a sus equipos, y lograr un impacto duradero. Ese es el ideal que se persigue desde la comunicación política. Mañana en Ciudad Juárez, veremos qué mensaje da a las y los juarenses.
