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La economía que recibe la presidenta

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Rubén Aguilar Valenzuela

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo (CSP) recibe de su antecesor una economía con problemas en muchos frentes.

El PIB, en el sexenio pasado solo creció en 0.8% por año, que es el más bajo de los últimos seis sexenios y hay que ir hasta el de Miguel de la Madrid (1982-1988), para tener uno donde la economía tampoco creció.

La promesa de campaña de López Obrador había sido crecer al 4.0% anual, al doble de los gobiernos a los que llamó neoliberales. Esos gobiernos crecieron entre dos y tres veces más que el suyo.

Por lo mismo baja también el PIB per cápita que en el sexenio de López Obrador fue negativo con -2.70%; en el de Peña Nieto aumenta en 7.58%; en el de Calderón en 5.5% y en el de Fox en 10.88%.

Aquí también los gobiernos que la 4T llama neoliberales ofrecieron mejores resultados que en el de López Obrador, que supuestamente rompe con el anterior modelo.

Los especialistas sostienen que el crecimiento del PIB y del PIB per cápita es condición para el desarrollo social y el progreso de las personas.

Uno de los grandes retos de la presidenta es hacer que crezca la economía y que aumente el PIB per cápita, cosa que su antecesor no logró.

Es condición necesaria para generar más empleo y que este sea de calidad, para que las familias tengan mayores ingresos producto de su trabajo, y por lo mismo acceso a mayores bienes y satisfactores.

El presidente López Obrador recibió una deuda total acumulada a lo largo de los años de 10 billones de pesos, pero solo en su sexenio creció en otros 7 billones de pesos.

La presidenta recibe una deuda total acumulada de 17 billones de pesos y con las arcas vacías. En el sexenio pasado se gastaron todas las reservas históricas acumuladas por los gobiernos anteriores.

Al sólo asumir el gobierno ha tenido que pedir un préstamo de 17 000 millones de dólares, para hacer frente a los gastos inmediatos. Ahora una cantidad importante del gasto público debe destinarse al pago de la deuda.

A pesar de todos los miles de millones que se le invirtieron a PEMEX el sexenio de López Obrador es el que menos barriles ha producido con un promedio de 1.5 millones diarios en 2024.

En el 2018, último año del gobierno de Peña Nieto fueron 1.8 millones de barriles diarios, en el 2012, el último año de Calderón, 2.54 millones de barriles diarios y en 2006, el último año de Fox, 3.25 millones de barriles diarios.

La presidenta enfrenta un PEMEX con una deuda impagable y la más baja producción de los últimos 24 años. Evitar que siga siendo un saco roto, hacerla rentable y productiva es uno de sus más grandes retos.

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