Redacción Sentido Común
El piloto mexicano Pedro Rodríguez ganó la Fórmula 1 en 1970 con el BRM P153, dicho vehículo regresará a las pistas con el piloto Adrián Fernández para llevarlo a una de las pistas más emblemáticas del deporte de motor, el GP Histórico de Mónaco.
La carrera reúne a modelos de competencia antiguos de la Fórmula 1 y se realizará del 10 al 12 de mayo de 2024, ahí Fernández, subcampeón de la serie CART (IndyCar) correrá contra gente como el ingeniero de Red Bull Adrian Newey.
Para Fernández no era nuevo estar en el asiento del coche, puesto que ya lo había conducido en 2022 durante el Gran Premio de México, tras las gestiones de Rodrigo Sánchez, directivo de la carrera. Pero ahora la situación es diferente dado que el monoplaza ya es propiedad del mexicano.
A pesar de que el vehículo se encuentra más adaptado para la conducción de Fernández, él mismo admite el respeto que le genera entender la conducción de los pilotos como Pedro Rodríguez en aquellos años donde el riesgo era mayor.
El primer factor para que Adrián Fernández comprara el coche fue conocer a Jaime Bergel, coleccionista español privado. Después de manejar el coche en México le quedó la semilla de poder comprarlo y en un viaje de vacaciones a España volvió a ver a su dueño e hizo la primera oferta.
“Luego, nos invitó a quedarnos en su rancho con mi familia y estuvimos compartiendo, fue entonces que me comentó “me acaban de hacer una oferta, obviamente no lo estoy vendiendo, pero me llegó una oferta de unos rusos para comprarlo”. Yo le comenté “acuérdate que yo te dije” y pensó que yo estaba bromeando. Lo pensó y al final se tentó el corazón. También entendió lo que representaba para Adrián Fernández tener este coche, lo que representaba para México”.
