Ricardo Esquivel Castañeda
Los medios de comunicación han dado a conocer ya como viene el PEF 2025 y sin ser expertos en estudios económicos podemos observar que sigue la tendencia del anterior gobierno de priorizar algunas obras faraónicas como el Tren Maya y descuidar las obras y servicios que podrían brindarle a la gente mejor bienestar.
Por ejemplo, la Secretaría de Salud tendrá 918.4 mil millones de pesos, lo que representaría un recorte de 11.0%, respecto al 2024; SEP 1.5 % menos que en 2024; la Secretaría de Cultura sufrirá también una disminución de 30%; los estados y municipios ahora tendrán 1.2% menos de los recursos recibidos en el presente año.
Lo que estamos viendo es menos atención a las necesidades del pueblo, eso se llama política neoliberal, aquella que se desentiende de las necesidades de la gente y se pone al servicio de los grandes capitales; porque ¿cómo se explica que se le recorte dinero a la salud y que se siga dejando a los hospitales sin insumos y medicamentos? ¿Cómo se explica que a la educación se le bajen los recursos y se deje de remodelar escuelas, atender carencias de agua potable, de drenaje, y a la educación superior se le desproteja con menos recursos? No hay explicación que justifique este proceder.
Es aquí donde entra la preocupación por los pueblos y comunidades marginados, que con esta política neoliberal las posibilidades de que se les haga justicia con alguna obra que tanto necesitan se aleja cada día más.
Por ello me interesa resaltar aquí la existencia de tres comunidades de Nayarit, Cantiles en Santa María del Oro y El Cuarenteño y Palapitas en el municipio de Xalisco, que, desde hace algunos años, como resultado de su unidad, lucha y tesón para llevar el progreso a sus pueblos, lograron que varios tramos de los caminos a sus comunidades fueran pavimentados por el gobierno, pero aún les faltan algunos kilómetros más en cada uno de ellos para estar totalmente comunicados con la ciudad de Tepic y con la cabecera municipales a las que pertenecen.
Las tres comunidades son productores de aguacate, café, mango, maíz, calabaza, jamaica entre otros productos más y contar con buenas carreteras para sacar sus cosechas con prontitud y menor costo en transporte contribuye también a mejorar la economía de las familias campesinas. Lo anterior por el lado económico, pero por el lado social, la comunidad también necesita la carretera para surtirse de alimentos, atenderse con rapidez en emergencias de salud, para trasladarse con comodidad en el transporte, mejor convivencia con comunidades vecinas a través de la educación, el deporte y la cultura, en fin, las carreteras son un medio importantísimo para la comunicación y el mejoramiento de la calidad de vida.
En el caso de estas tres comunidades, por ahí han pasado muchos políticos, de todos los colores y han hecho promesas de hacer justicia, y hasta el día de hoy nada más no se cumplen. Por eso, me parece que su idea y su anhelo de vivir comunicados con una buena carretera pavimentada es alcanzable, es una demanda justa y debe ser escuchada por las altas autoridades del país, del estado y de los municipios.
Los habitantes de estas comunidades han comenzado con el levantamiento de firmas y acompañadas de un oficio las han dirigido al gobierno del estado de Nayarit, a la Secretaría de Infraestructura, a la SCT y a los municipios de Xalisco y SAMAO esperando que sus demandas sean analizadas y de que se busque por parte de las autoridades la mejor manera de resolverlas.
Por nuestra parte, en el Movimiento Antorchista, hacemos eco de su demanda, de su anhelo y les comunica que estamos informando ya a todos nuestros compañeros Antorchistas de Nayarit de su problema, de ser solidarios con ustedes y que nunca debe de olvidar el pueblo que solo unidos, conscientes y en lucha combativa se hará que el gobierno invierta en las obras y servicio que tanto requieren las familias nayaritas.