Redacción Sentido Común
El pasado 17 de mayo, personal de Profepa, del Zoológico de Morelia, de la UMA San Francisco Uruapan y de la Policía Municipal acudieron a un predio ubicado en la Localidad El Guayabo Sur, Arteaga, Michoacán, para trasladar a 39 ejemplares de venado cola blanca, Odocoileus Virginianus, tras no contar con autorización ni plan de manejo para este tipo de ejemplares.
Este predio ya había sido inspeccionado por la Profepa anteriormente, luego de que su administrador presentará un escrito para poner a disposición de esta Procuraduría los ejemplares que tenía. Durante esa inspección se observó que el lugar no contaba con autorización de la Semarnat, ni podía acreditar la legal procedencia de los 36 ejemplares que tenía en ese momento; por ello, la Procuraduría aseguró los 36 venados, dejando como depositario al predio, con el fin de que se regularizara como UMA ante la Semarnat.
Sin embargo, a la fecha no ha presentado documento alguno que acredite su registro ante la Semarnat; al no contar con las autorizaciones correspondientes se decidió trasladar los ejemplares a UMAs y predios que cuentan con las instalaciones adecuadas y seguras para la especie.
En la visita realizada el 17 de mayo se observó que hubo reproducción de ejemplares: en vez de los 36 originalmente identificados, ahora eran 45, los cuales fueron revisados y valorados y se procedió a reubicarlos de la siguiente forma: 39 ejemplares fueron trasladados a dos lugares autorizados y que cuentan con plan de manejo y seis se quedaron en el predio, por la imposibilidad de trasladarlos en ese momento.
Para el traslado de los ejemplares se usaron anestésicos, aplicados con buenas prácticas para proteger el cuidado y la salud de los 39 ejemplares. Una vez reubicados, los ejemplares tuvieron una revisión médica por parte de veterinarios especializados.
La legislación mexicana establece que la posesión y exhibición de ejemplares de vida silvestre, ya sean nacionales o exóticos, requiere contar con las autorizaciones pertinentes y acreditar su legal procedencia.
La falta de cumplimiento con estas disposiciones puede resultar en sanciones que incluyen multas y decomisos. Es fundamental que cualquier instalación que maneja vida silvestre fuera de su hábitat natural cumpla con las normativas establecidas por la autoridad ambiental.