Ale Torres
Pues queriendo y no, se nos fue el año…Ojalá hayan cumplido sus propósitos, porque yo no (jojojo) La verdad es que soy más de objetivos que, pudieran parecer lo mismo, pero no. Al menos no para mí en estos casos que tiran más a «deseos» o ¿ustedes qué piensan?
Un propósito puede definir o determinar por qué haces lo que haces y qué te comprometes a hacer; en cambio, un objetivo, es parte de una meta clara y precisa que incluye las tareas que requieres para alcanzarlo.
No es lo mismo decir: «Mi propósito es no tener deudas o ahorrar», a decir: «En los primeros tres meses del año ahorraré 100 pesos cada mes, para abonarlo a mi deuda y disminuirla X por ciento»… o el clásico: «En enero me pondré a dieta y haré ejercicio»… a establecer: «En enero empezaré a ir al gimnasio todos los días, a las 7 am», o «saldré a correr lunes, miércoles y viernes, para empezar el día».
Dicen los que saben que los objetivos son metas a corto plazo, que incluyen tres cosas:
-qué es lo que la persona quiere
-con qué tiempo cuenta para alcanzar la meta y
-cuáles son los recursos que tiene planeado usar
¿Ya ven por qué dejé de creer en los propósitos y elegí ser más realista? La verdadad era como hacerme tonta sola. Además, la energía del «deseo» si bien nos va, dura poco y cuando dan las 12 y te comes una uva por cada deseo, nomás te atragantas. En cambio, si lo escribo a manera de objetivo, en un calendario/agenda, hasta siento que el inconsciente recibe la orden y empieza a concretarse, pero cada quién, ¿verdad?
Como sea, les deseo un gran cierre de año y que el balance incómodo sea siempre a favor.
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