Redacción Sentido Común
En Australia grupos ecologistas promueven un sacrificio masivo de canguros debido a que estos marsupiales podrían morir de hambre si no se controla la explosión de su población.
Cabe recalcar que el canguro representa un problema medioambiental importante para el país debido a su ciclo de reproducción. Su número puede llegar a decenas de millones cuando el forraje es abundante después de una buena temporada de lluvias, pero también pueden morir de forma masiva cuando se agota la comida.
De acuerdo con la ecologista Katherine Moseby, sacrificar canguros y destinarlos a la carnicería y a la marroquinería sería una manera caritativa de ahorrarles sufrimientos atroces y un medio de controlar su población.
“Durante la última sequía, estimamos que entre el 80% y el 90% de los canguros murieron en algunas zonas, entran a los baños públicos y hasta comen papel higiénico”.