Redacción Sentido Común
Los Cincinnati Reds rindieron un emotivo homenaje a Pete Rose, el líder histórico de hits en las Grandes Ligas, justo un día después de que MLB eliminara su nombre, de manera póstuma, de la lista de inelegibilidad permanente.
En el Great American Ball Park, la afición coreó con fuerza: “¡Pete! ¡Pete!”, mientras una lona con su legendario número 14 cubría el montículo durante la práctica de bateo.
El cambio de política anunciado por el comisionado Rob Manfred, que establece que las suspensiones permanentes expiran tras el fallecimiento del sancionado, abrió la puerta a este tributo.
Aunque su carrera quedó marcada por el escándalo de apuestas —que lo llevó a ser suspendido de por vida en 1989—, Rose siempre fue idolatrado en su ciudad natal. Su estilo aguerrido, las barridas de cabeza, la entrega total en cada juego y su identificación con la Gran Maquinaria Roja lo convirtieron en un símbolo para generaciones de aficionados.
La ceremonia incluyó un momento de silencio y la interpretación del himno nacional por parte del coro de la escuela secundaria donde Rose estudió. Camisetas con su número y recuerdos de su carrera decoraron las gradas. “Esta ciudad era mi papá”, expresó Fawn, hija del histórico pelotero, visiblemente emocionada durante el homenaje.
El nuevo estatus hace que Rose sea ahora elegible para el Salón de la Fama, aunque su ingreso no está garantizado. Su caso será evaluado por el comité de la Era Clásica del Beisbol en diciembre de 2027.