Adonaí Durán
La Crianza Positiva es un programa que se armoniza con la Ley para erradicar la violencia contra los menores en México y que pretende eliminar las formas ancestrales de educación hacia los niños y niñas en donde los golpes y maltratos eran parte fundamental, es por ello que Nayarit avanza con la armonización de las Leyes para tipificar y comenzar programas de sensibilidad para que las nuevas generaciones asuman que educar a sus hijos e hijas no es necesaria la violencia, expuso Concepción Rodríguez Llamas secretaria ejecutiva del Sistema de Protección Integral de Niñas Niños y Adolescentes (SIPINNA).
“Se refiere a la eliminación del castigo corporal y trato humillante, que todos sabemos de que se trata, aunque les pongamos otros nombres, pero es el chanclazo, el que una nalgada se acomoda. Son practicas disciplinarias que se han venido realizando de manera ancestral y de manera permanente y siguen siendo normalizadas” declaró la titular de SIPINNA.
“Ni golpes ni insultos por una crianza positiva” es el nombre del foro que presentó los avances de este programa y que a partir de una consulta nacional denominada “Opina” se cuestionó a las personas que lo que consideran en la crianza a sus hijos.
“Se encontraron resultados interesantes, sobre todo, esto de que siguen permaneciendo estas ideas de que se acomodan con un golpe y que la gente cree que estas personas adultas que en su momento fueron criadas por estas disciplinas violentas ahora están bien” sostuvo Concepción Rodríguez.
Con la armonización de la Ley y crianza positiva cabe resaltar que Nayarit es el estado que tiene más avance en el país.
“Necesitamos pasar a la acción, a la política pública, y ver de qué manera se tiene que implementar las acciones para que realmente los hogares, las escuelas en todos los espacios se pueda implementar la practicas de crianza positiva, con amor, respeto, cariño” dijo Rodríguez Llamas.
Finalmente, señaló que estas prácticas están ubicadas en los municipios de la zona serrana, así como Bahía de Banderas, aunque la titular de SIPINNA señala que es algo muy común en todas las familias de todos los municipios.