Redacción Sentido Común
Durante el brutal invierno de 1942 en Rusia, los mensajeros de Alemania se enfrentaban a temperaturas que descendieron hasta los -40 grados Celsius.
Estos mensajeros motorizados no eran soldados combatientes, solo formaban parte de las Divisiones de Comunicaciones del Ejército de la Whertmach.
Los motociclistas no solo lidiaban con el clima extremo, sino que también eran blancos constantes para francotiradores, campos minados, artillería y ataques aéreos.
Cabe mencionar que estos valientes individuos desempeñaron un papel crucial en la comunicación durante la guerra, pero pagaron un alto precio por su valentía.