Redacción Sentido Común
Kenia ha emprendido el proyecto de reubicación de los rinocerontes, el martes comenzó con la complicada labor de rastrearlos, lanzar dardos tranquilizantes y trasladar a un nuevo hogar a 21 ejemplares de la especie amenazada, los cuales pueden pesar más de una tonelada.
El proyecto más reciente tuvo problemas al comienza, un rinoceronte tranquilizado con un dardo disparado desde un helicóptero terminó en un riachuelo. Los veterinarios y guardabosques mantuvieron la cabeza del rinoceronte fuera del agua con ayuda de una cuerda para salvarlo mientras un fármaco para revivir los efectos del tranquilizante hacía efecto y el animal fue liberado posteriormente.
Hace seis años, Kenia reubicó a 11 rinocerontes de la capital Nairobi a otro santuario en el sur del país, todos murieron poco después de haber llegado al santuario, diez fallecieron por estrés, deshidratación y hambre, lo que fue intensificado por un envenenamiento por sal mientras se adaptaban al agua salada de su nuevo hogar.
Kenia ha tenido un relativo éxito en aumentar el tamaño de su población de rinocerontes negros, que estuvo por debajo de los 300 ejemplares a mediados de la década de 1980 debido a la caza. En la actualidad Kenia tiene la población de casi mil rinocerontes negros, es la tercera más grande de rinocerontes negros en el mundo.
Solo hay 6 mil rinocerontes salvajes en el mundo, de acuerdo con la organización benéfica de conservación Save The Rhino y todos se encuentran en África.