Redacción Sentido Común
En China, son muchos los jóvenes que sufren de aislamiento social o problemas para interactuar, la mayoría de ellos sufren de lo que se conoce en Asia como el síndrome de Hikikomori, el cual afecta entre el 1% al 2% de los adolescentes y jóvenes adultos en países como Japón, Corea del Sur y la propia China.
Muchos jóvenes han recurrido a animales robóticos programados con inteligencia artificial para no sentirse solos. Uno de esos casos es el de Zhang Yachun, quien ahora se siente más acompañada gracias a BooBoo, un robot peludo que parece un conejillo de India creado por la empresa Hangzhou Genmoor Technology y que utiliza la inteligencia artificial (IA) para interactuar con los seres humanos.
“Tengo la impresión de tener a alguien con quien compartir los momentos felices”, explica la joven de 19 años a la agencia de noticias AFP en su departamento, donde vive con sus padres. Ella bautizó al suyo como Aluo y lo transporta en su bolso todos los días, agrega.
Además, su compañero peludo tiene el mismo papel que un amigo humano, según sus propias palabras. “Te hace sentir como que eres alguien a quien se necesita”, asegura.
Estos robots cuestan 1.400 yuanes, unos 190 dólares estadounidenses.
Según Adam Duan, de la compañía que lo ha desarrollado, desde mayo, ya se han vendido unas 1.000 unidades de este robot, del tamaño de un balón de rugby, creado específicamente para las necesidades sociales de los niños.