Antonio Hau
El Ayuntamiento de Ixtlán del Río enfrenta una delicada situación financiera tras una resolución judicial que ordena la reinstalación de aproximadamente 30 trabajadores, además de su indemnización, lo que generará un gasto cercano a los 40 millones de pesos. Así lo informó el presidente municipal, José Guillermo Ramírez.
«En su momento no se atendieron estos casos y se aplazaron con acciones legales. Esto pudo resolverse con un costo mucho menor, pero ahora debemos asumir la responsabilidad y hacer frente a esta situación», señaló el alcalde.
La resolución representa un desafío significativo para la administración actual, que deberá destinar recursos que afectarán la operación de diversos programas y proyectos municipales.
En el mismo contexto económico, Ramírez indicó que se han tomado acciones legales contra la administración pasada, encabezada por Nayeli Pardo, debido a un presunto desfalco de 27 millones de pesos. El caso ha sido turnado a la Fiscalía General de Nayarit, y se espera que se avance en la reparación del daño.