Juan Chávez
“¿Cómo que se suicidó?, se veía tan normal”, es una de las expresiones más comunes cuando alguien sabe que un conocido o vecino salió “por la puerta falsa” o tomó la decisión “más sencilla”, huir. Las familias de quienes atraviesan por una muerte así, muchas de las ocasiones tratan de ocultar el porqué del fallecimiento porque sienten vergüenza de que la “sociedad” conozca las razones, pero aún más juzguen sin conocer qué realmente llevó a esa persona a decidir no seguir viviendo.
Luis lo sabe muy bien, su hermano menor de apenas 32 años, casado con una chica de su edad y guapa, y con un hijo que hoy tiene 3 años de edad, buscó la forma de quitarse la vida, después de varios problemas económicos, laborales y tras múltiples discusiones con la esposa, quien le echó en cara que ella haya dejado su carrera de enfermería y sus sueños de aprender a maquillar y peinar porque él le ofreció una vida cómoda, con viajes, carro y hasta quien le pudiera ayudar en la casa, él en ese tiempo tenía un buen trabajo con ingresos que le permitieron cumplir por casi 5 años con las promesas.
Tras la quiebra de la empresa y el despido de todo el personal, Luis fue testigo de cómo su hermano adelgazó, dejó de comer, de fumar, tomar y dormir, llegó al punto de que la presión que sentía, el cúmulo de sus problemas y la impotencia ante muchas situaciones, lo hizo que intentara quitarse la vida; buscó el método común, echar una soga alrededor del cuello, ésta pendía de una viga, cuando estaba por patear la silla donde estaba parado y quedar colgando, el llanto de su hijo, de apenas en ese entonces de un año y meses, lo impidió. Luis al saberlo se enojó consigo mismo por no prestar la atención necesaria a su hermano, hoy todos apoyan con terapias, solidaridad familiar y poco a poco las sonrisas han vuelto.
Su historia me lleva a indagar los datos sobre el suicidio y es que este 10 de septiembre fue el Día Mundial de la Prevención del Suicidio. Lo lamentable es que cada año se quitan la vida aproximadamente 900 mil personas en el mundo, lo que significa que cada 40 segundos alguien se suicida, de acuerdo al reporte más actual de la Organización Mundial de la Salud.
Está problemática social es la segunda causa principal de muerte entre personas de 15 a 29 años de edad y por cada suicidio hay más de 20 intentos de éste, vale la pena no sólo dar datos, sino hablar de las causas, de qué está haciendo la autoridad y sobre todo, nosotros como personas, para evitar este fenómeno, el cual es prevenible.
Desafortunadamente ni México ni Nayarit son ajenos a esta problemática, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en la última década, la tasa de suicidios en el país presentó una tendencia creciente de más del 100 por ciento; en Nayarit el número es preocupante, la cifra oficial es que en el 2017 fueron 66 personas las que se quitaron la vida y en lo que va del año van más de 50.
Dejando a un lado las estadísticas, lo más alarmante es que, sí hacemos un pequeño ejercicio de investigación con compañeros y amigos, o incluso una reflexión interna, nos daremos cuenta que la mayoría de nosotros sabemos del intento de o suicidio de un conocido, de alguien que vivía por la colonia, estudió en la misma preparatoria o universidad que nosotros, e incluso de algún familiar.
La cuestión es que la OMS afirma que todas las personas que cometerán un acto suicida dan muchas “Señales”, cambios en la personalidad, como tristeza, irritabilidad o apatía; en el comportamiento, como falta de concentración en la escuela o el trabajo, pérdida o aumento exagerado de apetito, insomnio o demasiado sueño, desinterés en los amigos, etc., sin embargo, pareciera que los nayaritas nunca detectamos dichos focos de alerta en las personas que nos rodean, a pesar de que las manifiestan. Si bien se dice que la principal causa del suicidio es la depresión, la realidad es que este fenómeno es multifactorial, es decir, nunca tiene una sola causa.
La Universidad Autónoma de Nayarit, en coordinación con Salud Mental de la Dirección de Sanidad Municipal de Tepic, arrancaron este lunes una campaña para la prevención del suicidio, con conferencias para el público en general, para funcionarios de los tres órdenes de gobierno, esta incluso el Vicepresidente de la Red Mundial de Suicidología, Domingo Abarca y durante todo el mes habrá talleres, obras de teatro, carreras y muchas actividades que buscan visibilizar ante la sociedad la gravedad del suicidio pero sobre todo, la forma en la que se puede prevenir; escuchar a nuestros seres queridos, es la clave entre la vida y la muerte. Mándame tus comentarios, dudas y sugerencias a mi Facebook Juan Félix Chávez Flores o a mi correo Juanfechavez@gmail.com