Redacción Sentido Común
Como un reconocimiento a la rectora Norma Liliana Galván Meza y a su labor en el segundo año al frente de la máxima casa de estudios, fue tomado por algunos el mensaje de respuesta al mismo informe de parte de la investigadora Dra. Amelia Gascón Cervantes.
En varios momentos dentro de su participación hubo espacio para el reconocimiento y la reflexión: “esta administración coincide con medio siglo de muchos de los muros de los edificios universitarios por lo que no es de extrañar que, prácticamente, se ha tenido que dar rehabilitación y mantenimiento casi en la misma cantidad de metros cuadrados que se han construido, y entiendo que el principal reto ha sido definir cómo garantizar la seguridad y, a la vez, lo funcional de los espacios en esas condiciones cuando hay poco recurso”. Y extendió su comentario sobre el tema: “me gustaría destacar la construcción de la primera etapa del edificio para la unidad académica de artes cuando una universidad se plantea una estructura tan importante y exclusiva para el arte y la cultura puede la sociedad considerar que su universidad ha madurado y la vez la universidad puede sentir esperanza por la madurez de la sociedad que le requiere con este tipo de programas porque el arte es en mi opinión la forma más sofisticada y exquisita de expresar el conocimiento”.
De diversas formas la petición también era hacia afuera, hacia los representantes de los diferentes poderes y órdenes de gobierno: “tratándose de una universidad pública somos el necesario reflejo de las políticas vigentes y las políticas públicas vigentes deben prevalecer al servicio de la sociedad”. Para ella, “un pueblo que vive en democracia verdadera asumirá responsabilidades históricas y eso necesita conocimiento y formación para el manejo del conocimiento a eso nos dedicamos las universidades públicas de México al menos a eso nos deberíamos dedicar por eso necesitamos el apoyo y el respaldo de quienes manejan las políticas públicas en México”
Orgullosa de su institución e historia sostuvo: “la grandeza de esta universidad está en la dignidad de su origen, la creatividad, nobleza, resistencia y la insistencia de la comunidad universitaria así como la pasión traducida en gestión incansable que se renueva cada año y que ha permanecido firme en sus motivaciones elevadas durante décadas en esta universidad; hay académicos, científicos, trabajadores, estudiantes de verdad, que son los universitarios que han mantenido viva la universidad, los que trabajan por convicción por agradecimiento por esperanza e incluso en momentos de gran desconsuelo hasta por fe pero muchas veces la actitud no es suficiente se necesita insisto el respaldo integral de la sociedad y de las autoridades”.
Y también se dio tiempo para señalar las cosas buenas: “no quiero concluir esta intervención sin hacer un especial reconocimiento al trabajo de la rectora la Dra. Norma Liliana Galván Meza, muchos universitarios somos conscientes del difícil papel que usted está ejerciendo en este momento al interior la comunidad universitaria, le demandamos o le exigimos más recurso y más libertad de acción y decisión, al exterior le demandan cuentas precisas y racionalidad en el manejo de los recursos, o incluso, que administre bien la austeridad al interior; le demandamos la solución inmediata de nuestras necesidades y al exterior usted tiene que justificar, con documentos que muchas veces roza la obviedad, porque no se debe limitar recurso al espacio educativo que dirige. Algunos universitarios le agradecemos que se reserve para sí y su equipo la preocupación por la que pasa cada año desde hace 10 años la Universidad Autónoma de Nayarit sobre el tema de salarios y prestaciones de los trabajadores al final del año, usted ha tenido en los últimos dos años la cortesía, la fortaleza y la elegancia de no estresarnos más con eso pero cualquier universitario sensible informado sabe que esa es una circunstancia de riesgo con la que nuestra universidad camina cada día y con la que usted inicia y concluye cada jornada nada fácil debe ser eso”.