Redacción Sentido Común
Los caracoles de mar y silbatos con sonidos de jaguar se hicieron sonar y las manos de los visitantes se levantaron hacia el cielo justo al medio día para “llenarse de energía” y dar la bienvenida al equinoccio de primavera en la Ciudad de Los Dioses, Teotihuacán.
Aún cuando oficialmente el equinoccio de primavera en México inició el jueves 20 de marzo a las 3:01 horas, este viernes fieles a la cita y a la creencia; miles de turistas nacionales y extranjeros colmaron Zona Arqueológica.
En punto de las 12:00 del día, cuando el sol pegaba a plomo, unas 10 mil personas se congregaron frente a las pirámides del Sol y la Luna, así como en la Calzada de Los Muertos.
Fue el punto máximo para los asistentes, quienes tras alzar las manos y dirigir sus plegarias hacia los cuatro puntos cardinales hicieron sonar todo tipo de objetos como silbatos, cuarzos, obsidianas o caracoles que llevaban o simplemente un grito o un aplauso para culminar su ritual.
Frente a la pirámide del Sol, dos grupos de danzantes prehispánicos se colocaron para realizar sus danzas, acompañados de tambores y sahumerios con incienso.