Redacción Sentido Común
Cuba dio un paso importante en su transición energética con la inauguración de su primer parque solar fotovoltaico en La Habana. Esta instalación forma parte de un ambicioso plan gubernamental que prevé la construcción de más de 90 parques solares en el país, con 55 de ellos en funcionamiento antes de finalizar el año. El objetivo es reducir la dependencia de combustibles fósiles y mejorar la estabilidad del Servicio Eléctrico Nacional, que ha enfrentado crisis debido a la escasez de diésel y repuestos para termoeléctricas.
El parque cuenta con 42,588 paneles solares distribuidos en 1,635 estructuras, con una capacidad de generación de hasta 21.7 megavatios. Se estima que esta energía limpia permitirá un ahorro anual de 8,700 toneladas de diésel, contribuyendo así a la reducción de emisiones contaminantes. Además, Cuba posee condiciones climáticas favorables para el aprovechamiento de la energía solar, con una alta radiación a lo largo del año que permite la generación incluso en días nublados.