Ernesto Villanueva
Hace 14 años nació el diario digital Quadratín Oaxaca siendo su directora fundadora la inteligente comunicadora, Lupita Thomas. En esa oportunidad, me tocó en suerte ser el orador del evento de referencia. En 2005 el Internet empezaba a tener carta de naturalización en México, sin las amenidades y la velocidad de conexión que existe ahora, por supuesto. Mi buen amigo Paco Davish había apostado a las nuevas tecnologías como una vía alternativa a los medios tradicionales y había abierto el primer diario Quadratín en Morelia, Michoacán de donde soy oriundo. Era una apuesta riesgosa, sinuosa y complicada porque a principios del siglo XXI no existía una cultura mínima para informarse a través de la red de redes. Era la época donde la tinta y el papel daban salida a la libertad de prensa y a la libertad de información. Paco, no obstante, persistió en lo que en aquella época se antojaba una aventura sin destino seguro. Lo era todavía más intentar un proyecto periodístico de la periferia al centro como fue el caso inicial de Quadratín. Vamos, ni siquiera en la Ciudad de México el Internet tenía una masa mínima de lectores. En estos 14 años las cosas han cambiado sustancialmente. Hoy la migración total o parcial de los medios impresos al Internet es un hecho. Se puede atestiguar cómo los medios tradicionales han disminuido tiraje y reducido el número de páginas habidas en el 2000. Lo que se publica en las versiones digitales perdura en el tiempo a través de los distintos buscadores y las distintas redes sociales. Tienen también una actualización en tiempo real y son interactivas, una realidad para muchos jóvenes que se informan a través de sus teléfonos inteligentes de manera principal y de laptops y tabletas en segundo término. Las versiones impresas tienen más pasado que presente y se avizora difícil su futuro mediato. Son hoy parte de la nostalgia de un pasado que se ha ido y de un presente terco en limitar o acotar el futuro de los medios tradicionales por sus costos y su reducción de audiencias.
En esa lógica, el sueño de Paco Davish demuestra que se adelantó a su tiempo y tuvo la visión que sólo años después los diarios en papel verían la versión digital no ya como un complemento de su edición habitual, sino como un nuevo medio con una público distinto que ha demandado una reforma paulatina en el qué y en el cómo garantizar el derecho a saber de la comunidad. En estos años Quadratín ha sumado 16 ediciones en igual número de estados y se ha consolidado como un medio con una apreciable audiencia (el primer lugar en medios digitales fuera de la ciudad de México, de acuerdo a Comscore, la calificadora más seria en la era digital) y con credibilidad donde se dan cita distintas voces que expresan el pluralismo informativo que es un rasgo distintivo de las democracias. Por ello, me congratula que me hayan invitado a ser orador en esa oportunidad y haber asistido al nacimiento de esta aventura hoy convertida en un sólido referente informativo y de opinión.
Sumario
El talento y la honestidad son paradójicamente valores escasos y costosos en una sociedad de doble moral. Hoy le toca enfrentar esa realidad al distinguido dirigente deportivo José Antonio Flores, presidente de la Federación Mexicana de Tenis A.C., quien ha sido apoyado por los asociados de esta Federación para que permanezca un periodo más en ese cargo honorífico (2020-2024), el cual se decidirá hoy en Campeche. Paradójicamente, la honestidad de José Antonio ha generado resistencias al cambio, en una lógica del absurdo. Ver para creer.
@evillanuevamx
Original de spdnoticias.com
