Jorge Paredes
Ante la gran diversidad de opciones que tenemos como consumidores, una alternativa lógica para atraer al mercado es la promoción. Sin embargo ¿es realmente la promoción algo benéfico para todas las marcas?
Si bien es cierto que una promoción siempre resulta atractiva, ésta debe ser bien pensada y utilizada por los negocios. La promoción debe utilizarse en periodos de apertura o temporadas bajas y que impacte realmente en un beneficio real para el cliente y que favorezca una construcción en la fidelidad a la marca.
El error de muchos negocios es centrarse en una estrategia promocional y descuidar aspectos fundamentales como la calidad en el servicio y en los productos. Esto sólo generará la atracción de los cazadores de promociones: aquellos consumidores que asisten o tal o cual lugar exclusivamente los días de promoción.
¿Estás sacrificando costos por beneficios en tu negocio?, debes preguntarte antes de tomar decisiones.