Luis Rubén Maldonado Alvidrez
Justo en una semana usted estará ante un dilema: que su domingo sea uno “normal” sin salir mucho de casa y pelear contra las pesadas sábanas de la cama o levantarse de la cama, ubicar su casilla y plantarse frente al número de boletas que le corresponda a cada estado, ya que, en algunas entidades las elecciones presidenciales son concurrentes con las elecciones locales.
Son unos segundos por boleta, los que tendrá antes de decidir quién ocupará, por los próximos años, algunos cargos, en el que destaca el máximo a nivel nacional: la presidencia de la república.
No hay más camino: una mujer será, por primera vez, presidenta de México. La candidatura tardía y atropellada de Jorge Álvarez Máynez nunca repuntó y la tragedia de este fin de semana suscitada en un mitin de campaña, ha sido el punto final de una campaña testimonial y aliada de Morena.
Es una elección polarizada, muy polarizada; México está frente a dos proyectos de nación que significan cosas diametralmente opuestas: Morena y el retroceso democrático; PRI-PAN-PRD por un México de libre mercado y democracia en constante desarrollo.
Nada está definido. Usted tiene el poder de definir la realidad de México con su voto el próximo 2 de junio; la propaganda inusitada y forzada para crear la percepción de la inevitabilidad del triunfo de Claudia Sheinbaum es un mero espejismo.
En el cuartel de Claudia Sheinbaum, en vez de enfocarse en pedir el voto, intensificaron la campaña de encuestas que le dan ventajas irreales frente a Xóchitl Gálvez. Usted con su voto tiene el arma idónea para probar que esas encuestas infladas son una mentira.
¿Será un domingo electoral tranquilo?
López Obrador utilizará todos y cada uno de los recursos del Estado mexicano para no respetar la voluntad de las y los mexicanos. Hay miedo en sectores de la población afines y no al morenismo oficialista por dos razones: miedo a perder las becas y apoyos económicos y el miedo a que las fuerzas militares y de seguridad sean utilizadas contra los seguidores de Gálvez para que no puedan llegar a las casillas a votar; también hay mucho miedo entre funcionarios de casilla, quienes han sido amenazados por Morena, crimen organizado, entre otros factores del poder federal y, en casos, obligados a renunciar.
Tristemente, podemos vaticinar, por las vísperas, que será un dos de junio violento en el que López Obrador desde Palacio Nacional va a querer impedir que los opositores a su gobierno lleguen a las urnas, y si llegan, va a utilizar todas las herramientas posibles para que esos votos no se respeten.
¡Es momento de despertar!
Hay que dejar atrás el miedo y acudir a votar.
Yo lo haré por la mejor opción, Xóchitl Gálvez, quien, además, tiene el mejor equipo de campaña que la respalda y que será, sin duda, un gran activo para la próxima administración federal, que llegará a corregir mil y un decisiones estúpidas y populistas que han vaciado las arcas de la nación.
Xóchitl necesita equipo, también, en la cámara de senadores y diputados: por eso mi voto es por Daniela Álvarez y Mario Vázquez al senado, así como como por Manque Granados a la diputación federal del sexto distrito.
En la capital del estado, la continuidad es la opción: hace más de tres años éramos muy pocos los que apostábamos por Marco Bonilla para la alcaldía; le criticaban su juventud y falta de experiencia electoral como candidato.
Con todo en contra, Marco Bonilla se hizo de la candidatura a la alcaldía por el PAN y arrasó en las urnas a Marco Adán Quezada, el peor alcalde de la historia moderna de Chihuahua.
En campaña prometió obras públicas y soluciones posibles, sin exagerar, pero de gran calado, esas obras en la actualidad son una realidad.
Hoy Marco Bonilla es candidato del PRI a la alcaldía también y se le ve muy cómodo; ha convencido a priistas de todas las generaciones y le ha devuelto esperanza a un partido que estaba dormido y secuestrado por los mismos de siempre.
Así que, mi voto va por Marco Bonilla; más Bonilla mejor Chihuahua.
Vota todo PRI este 2 de junio y saquemos a Morena del Palacio Nacional.
ESPRESSO COMPOL
Es muy lamentable lo sucedido en San Pedro Garza García, en el estado de Nuevo León. Una tragedia que ha sacado a relucir lo polarizado y ácido que está el ambiente electoral mexicano: desde tuits, declaraciones y memes. Así termina uno de los periodos electorales mexicanos más polarizados del siglo XXI.