Tere Sumaya
El proceso de muerte de un ser querido y las fases del duelo ante esta pérdida se viven de diferente forma dependiendo del miembro de la familia (si es la madre, el padre, hermano, abuelo, abuela, etc.). Para algunos el lapso de la muerte y el velorio pasara como si fuera un sueño, donde su cerebro se niega a ver esa realidad debido al gran dolor que les produce. Mientras que otros se permitirán expresar ese dolor con un profundo llanto. La expresión de los sentimientos será mucho más sanador que la represión de los mismos.
Por ejemplo, la muerte de un hijo se vivirá diferente dependiendo de la forma en que ésta sucedió, si fue muerto en un accidente, por enfermedad, por suicidio o por un crimen, ya que además del dolor por la pérdida podrán existir sentimientos de culpa, enojo o hasta venganza. Este evento puede unir a una pareja o desunirla para siempre. Es importante saber cómo sienten los hermanos ante este suceso, ya que muchas veces son excluidos del velorio y del duelo de los padres, aunque obviamente ellos también están afectados por la pérdida de su hermano, sin embargo, los padres tratan de vivir su duelo de manera muy personal y evitan compartirlo.
Los abuelos sufren un doble dolor: el perder al nieto y ver el dolor de su hijo o hija. Los varones generalmente no pueden expresar de la misma manera el dolor que las mujeres ya que creen que deben de ser el sostén de la familia. Todos estos factores influyen en cuanto tiempo se vida el duelo, si se vive de manera normal o se vuelve crónico.