Redacción Sentido Común
Con el propósito de que los productores pongan en marcha sus ideas de negocio, aumenten su productividad y tomen mejores decisiones económicas y ambientales, en la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la UNAM se presentó el proyecto “Educación en línea para negocios rurales en el marco de la economía social”.
Se trata, de acuerdo a un comunicado de la máxima casa de estudios, de un plan de educación en el trabajo para quienes laboran en organizaciones surgidas a partir de ejidos, comunidades agrarias y pequeños productores; desde sociedades de producción rural hasta asociaciones de interés colectivo. “Ellos tienen la capacidad, pero requieren apoyo”, indicó Alejandro Polanco, académico de la entidad y responsable del proyecto.
Está dirigido a profesionales y técnicos (agrónomos, veterinarios, administradores) que trabajan para o con organizaciones involucradas en el desarrollo económico, en este caso, del sur-sureste del país.
Tras señalar que este proyecto es importante por el rezago del sector rural, Polanco explicó que la economía social o solidaria es un tejido de actores económicos y sociales, empresas y organizaciones, que ofrecen bienes y servicios dirigidos a las necesidades de la sociedad, con un rasgo particular: anteponen el bien común a la maximización de ganancias.
El sector rural mexicano se caracteriza por una población empobrecida, con mala salud, productores envejecidos, mujeres solas al frente de unidades productivas o abandono de predios, que se suman a la inseguridad alimentaria, el asedio de grandes corporaciones a los territorios y políticas públicas fallidas, entre otros aspectos.