Redacción Sentido Común
El nombre de Julio César Chávez Jr. ha resonado en los medios desde hace varios meses y no por las razones correctas, y es que el boxeador mexicano se ha enfrentado a un fuerte problema de consumo de sustancias, mismo que ha mermado su calidad de vida y la relación con su familia. Pero después de un incidente en Estados Unidos donde fue detenido por portar supuestas armas de fuego, el boxeador se ha tomado en serio la rehabilitación, pero ahora perece ser que su salud se encuentra en riesgo pues unos estudios encontraron anomalías en su hígado.
Recientemente, el boxeador reapareció en redes sociales en una imagen que contrastaba con sus últimas publicaciones, ya que en ella se le puede ver bastante tranquilo en compañía de su padre (Julio César Chávez) y sus dos hijos, transmitiendo una atmósfera de unidad y bienestar familiar. Además, compartió historias en las que disfrutaba de una tarde junto a sus seres queridos, mostrando así un renovado ánimo y vitalidad.
No obstante, más allá de estas muestras de su retorno a la vida pública, Chávez Jr. contó a sus seguidores que se sometió a una serie de estudios médicos generales para evaluar su estado de salud y aunque los resultados resultaron en su mayoría positivos, el boxeador reveló que los médicos detectaron la presencia de una pequeña masa en su hígado y aunque los estudios iniciales no arrojaron nada alarmante, sí debe someterse a más pruebas para descartar cualquier complicación.