Redacción Sentido Común
El mundo del activismo se encuentra de luto tras la repentina muerte de Elena Larrea, fundadora del santuario «Cuacolandia», dedicado al rescate y rehabilitación de equinos víctimas de maltrato animal. Colectivos animalistas han anunciado que continuarán con el legado de la modelo a través de la creación de la «Ley Elena», la cual buscará tipificar la zoofilia como un delito en todo el país.
A través de redes sociales la asociación «Salvemos a Benito» pidió el apoyo de los internautas para impulsar la «Ley Elena», la cual tendrá como objetivo conseguir que la zoofilia sea tipificada como delito a nivel nacional, un objetivo que la fundadora de «Cuacolandia» había comentado que buscaría lograr, esto tras el caso de Mila.
A lo largo de su carrera Larrea visibilizó el caso de Mila, una potranca que fue víctima de abuso físico y sexual por parte de sus dueños. La activista consiguió la custodia de la yegua y en colaboración con médicos veterinarios de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) logró que sobreviviera a las graves lesiones que presentaba.
A raíz de este caso, Elena emprendió una lucha en el Congreso del Estado de Puebla, para que los diputados aprobaran una reforma que permitiera tipificar la zoofilia como un delito. Gracias a su inquebrantable valor, la activista consiguió que, el pasado 15 de febrero, los legisladores aprobaran la reforma, la cual también exige que los municipios cuenten con Centros de Bienestar Animal para garantizar una protección integral a los animales.
Tras su logro en el Congreso de Puebla, Elena había comentado a sus seguidores que su siguiente objetivo era conseguir la tipificación de la zoofilia como delito a nivel nacional. Sin embargo, su repentina muerte truncó sus planes a futuro; ahora, organizaciones animalistas se han unido para continuar con el camino que Larrea pretendía recorrer en el país.
Sus restos fueron llevados a Cuacolandia para que los equinos pudieran despedirse de quien en vida fue su salvadora y protectora.