Redacción Sentido Común
El exprocurador general de la República durante el gobierno de Enrique Peña, Jesús Murillo Karam, recibió de un juez federal prisión domiciliaria por su estado de salud y su avanzada edad, el ex funcionario estaba preso en el Reclusorio Norte y actualmente se encuentra en la Torre Médica de Tepepan.
A pesar de esta liberación parcial, Murillo Karam aún enfrenta otro proceso relacionado con el caso de los 43 estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa, lo que le impide abandonar completamente la prisión.
El 3 de abril, la defensa legal de Murillo Karam informó que su cliente continuaba experimentando problemas de salud, incluyendo enfermedad pulmonar obstructiva crónica, hipertensión arterial sistémica e insuficiencia vascular cerebral. Estos problemas de salud persistían a pesar de la atención médica recibida.
José Javier López, el abogado defensor, destacó que su cliente había sido trasladado a diferentes centros hospitalarios en varias ocasiones para el tratamiento de sus condiciones de salud, incluyendo dos traslados al Instituto Nacional de Cardiología “Dr. Ignacio Chávez.”
La defensa argumentó que la medida cautelar de prisión preventiva era grave y peligrosa, poniendo en riesgo la salud continua de Murillo Karam.
La salud del ex procurador ha sido un factor determinante en la decisión del juez de modificar su medida cautelar. Como resultado, se ha ordenado que cumpla su prisión domiciliaria en su residencia en Lomas de Chapultepec, Ciudad de México, y se le ha impuesto el uso de un brazalete electrónico para monitorear su ubicación.
Es importante señalar que la prisión domiciliaria se aplica exclusivamente al proceso en el que enfrenta cargos por desaparición forzada, tortura y obstrucción a la justicia en el caso de Ayotzinapa.
No obstante, el exfuncionario continuará internado en la Torre Médica de Tepepan debido a otro proceso en el que se le ha impuesto la medida cautelar de prisión preventiva.