Gerson Hernández Mecalco*
Muchos mexicanos somos especialistas en aparentar lo que no somos. A la pregunta de:
– ¿Cómo estás? La respuesta inmediata es “bien” o mejor dicho “muy bien”.
La mera verdad es que usamos máscaras inconscientemente —y no de luchadores como mi Mil Máscaras o los de la banda de surf, “Lost Acapulco”—. La función de las máscaras es muy clara: permiten el autoengaño de quienes se benefician del poder, a la vez que crean una narrativa que lo oculta. El ejercicio de rendición de cuentas en la teoría de la democracia se alejó del formato de informe presidencial por parte de AMLO. Lo que vimos en Palacio Nacional fue el sueño perfecto de cómo quieren que sean las mañaneras, con 600 personas que no pregunten y aplaudan.
¡Fuera máscaras! Ojalá algunos de los 30 millones de mexicanos que votaron por AMLO, exijan a nuestros gobernantes que se quiten las máscaras. Dice el Dr. Luis Rubio, presidente de México Evalúa, en su libro Fuera máscaras (Wilson Center), que los políticos viven en su mundo y por muchos años convencieron al electorado de que sus proyectos eran viables y conducían a un futuro mejor.
Informes de gobierno. El comienzo es la parte más importante del recorrido decía Platón. Y fue el 1ero de enero de 1825 cuando el 1er presidente de México Guadalupe Victoria se presentó ante el Congreso para rendir lo que se convertiría en el primer informe. En su discurso aseguró que se había logrado “con penosos esfuerzos vestir, armar y aumentar» a las Fuerzas Armadas. Eso fue hace casi dos siglos, pero los temas siguen siendo los mismos. Tuvo que superarse la guerra de independencia, para que llegara la estabilidad política en el gobierno de Porfirio Díaz y se ofrecieran más de 60 informes. Y en la etapa post revolucionaria los caudillos se prepararon para el aplausometro.
Culto al presidencialismo. Con la llegada de los gobiernos civiles desde Miguel Alemán a Carlos Salinas se comenzaron a transmitir por tv, además de inserciones pagadas en periódicos, acompañados de desfiles con automóviles descapotados saliendo del Congreso hacia Palacio Nacional. Fue hasta después de la crisis económica de Ernesto Zedillo cuando el ritual político se empezó a desvanecer. Con la victoria del presidente Calderón, los siguientes mandatarios ya no comparecieron ante el Congreso, por no tener el control absoluto.
Don Daniel Cosío Villegas decía en El estilo personal de gobernar, que los políticos gobiernan a través de su personalidad, pero si hay un estilo personal de gobernar, también hay un estilo personal de comunicar. El primer informe de gobierno del presidente de nuestro país AMLO quedará en el recuerdo por el mensaje de burla a la oposición al afirmar que “los conservadores están moralmente derrotados”. Nadie ha podido desenmascarar el poder de López Obrador, porque sí es verdad que hay mexicanos que ante la inseguridad y el regreso del presidencialismo son felices, felices, felices…
Nuevo partido. Juan Francisco Torres Landa, Tere Paillés, Leopoldo Hernández, Doraluz Galindo, Rafael Dondé, y otros personajes celebrarán el próximo domingo la primera asamblea para el registro del partido político UNE México en la UVM campus Lomas Verdes, Edo. Mex. Se necesitan más de 300 mil afiliaciones y realizar 26 asambleas estatales con al menos cuatro mil ciudadanos dados de alta en el padrón de cada estado. Desean construir un Estado de Derecho sólido, reconstruir las instituciones, fortalecer la división de poderes, programas sociales no clientelares, combate a la pobreza sustentado en educación. Un Estado laico. Ya veremos dijo el ciego…
*Académico de la FCPyS-UNAM y comunicólogo político @gersonmecalco