Dr. Abel Ortíz
Gran polémica ha despertado el plan económico que tiene el gobierno de la República para el país durante el próximo ejercicio fiscal, alineado a una política de austeridad, privilegiando el “ahorro” presupuestal en el ejercicio del gasto público. En este escenario, en el proyecto del PEF 2020 se destaca una reducción en las asignaciones a varias secretarias como a continuación se describe: Para la Secretaría de Gobernación se prevé una reducción del 90% con relación al ejercicio fiscal anterior; al pasar de un presupuesto de 60,783 mmdp a solo 5,805 mmdp. La disminución en su presupuesto es debido a que ya no está a cargo de las tareas de seguridad las cuales ahora son responsabilidad de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. La Secretaria encargada de fomentar el turismo -una de las vocaciones económicas de México-, pasó de 8,785 mmdp a 5,034 mmdp a pesar de tener a su cargo el proyecto sexenal más importante: el Tren Maya. Por su parte, la Secretaría de Desarrollo Agrario -otra de las grandes vocaciones nacionales- recibirá 10,939 mmdp en lugar de los 18 mil 755 mmdp que recibió en 2019. Mientras que la Secretaría del Trabajo registra una reducción del 33% ya que recibirá 28 mil 756 mmdp en lugar de los 43 mil 269 mmdp del 2019. Finalmente la Secretaría de Economía -otra medular por cierto para la promoción del comercio internacional- tuvo una reducción del 31% en su presupuesto pues pasó de 9,056 mmdp a 6,256 mmdp.
En el ámbito de los estados, resulta pertinente destacar que desde el pasado ejercicio fiscal algunos gobiernos subnacionales tuvieron que recibir anticipos a cuenta de participaciones federales para poder cerrar su ejercicio fiscal, pero son recursos que tienen que amortizarse en el mismo ejercicio y asumiendo por supuesto el costo financiero establecido en la ley. También recordar que el gobierno federal dispuso de 120 mmdp del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios para compensar la caída en el ingreso fiscal del 2019. En este contexto, la seguridad presupuestaria de los gobiernos subnacionales para el 2020 es incierta ya que también el presupuesto de inversión se vio sustancialmente reducido. Como es de todos bien sabido, la recursos federales que por disposición de la Ley de Coordinación Fiscal reciben los estados representan entre el 90 y el 95% del total de sus ingresos. En el Proyecto del PEF 2020 se proyecta una asignación de Participaciones Federales para Entidades Federativas y Municipios de $ 944,271 mmdp superior en $ 24,454 mmdp que representa solo un 2.66% de incremento en relación con los $ 919,817 mmdp asignados para el 2019, mientras que para las Aportaciones Federales vía Ramo 33 se proyectan $ 759,384 mmdp contra los $ 735,759 mmdp asignados en el ejercicio anterior representando un incremento de $ 23,625 mmdp que se traduce solo en un 3.21%.
Para el caso particular de Nayarit los recursos del Ramo 33 se verán incrementados en un 3.24%, destacando el FAETA y el FASSA con los mayores porcentajes de incremento: 4.83% y 3.93% respectivamente. Mientras que los fondos de Infraestructura Social Municipal y de Fortalecimiento para los Municipios solo reciben incremento del 3.06%, información que resulta muy valiosa para la preparación de los presupuestos municipales, partiendo de las asignaciones -no de lo que hayan presupuestado para el 2019, error que con frecuencia se localiza- contenidas en el acuerdo de distribución publicado en el POE el 31/01/2019 disponible en http://periodicooficial.nayarit.gob.mx:8080/periodico/resources/archivos/A%20310119%20(18).pdf y aplicándoles el citado porcentaje. Lamentablemente este nivel de desglose aun no se logra en el PEF por lo relacionado a las Participaciones Federales, por lo que poco ayuda en este sentido a Entidades y Municipios esperar a conocer el paquete fiscal, como lo establece la Ley de Disciplina Financiera. Por lo que corresponde al presupuesto de Inversión estatal este se vio disminuido de $ 3,436.1 mmdp a $ 2,802.4 mmdp, siendo los sectores rural, comunicaciones y transportes, hidráulico y cultura los mas afectados. En este importe, se incluye el subsidio federal para la UAN que registra un incremento del 3.0% el cual resulta menor en 0.35% al aumento salarial otorgado en Abril a los trabajadores universitarios, con sus consecuentes repercusiones.