Redacción Sentido Común
«Si volviera a nacer, la volvería a matar», declaró María “N” en el año 2013 en Tepic, Nayarit, en la colonia Lazaro Cardenas, luego de ser detenida por presuntamente apuñalar 32 veces a su mamá, quien también declaró a la policía que durmió a su progenitora y usó un inmovilizador eléctrico para torturarla, antes de asesinarla.
María “N” puso en la comida de su mamá pastillas para dormir y luego intentó electrocutarla con un inmovilizador. Las descargas eléctricas sacaron del estado somnífero a la víctima, por lo cual comenzaron una pelea.
El Fiscal de Nayarit en ese entonces, Edgar Veytia, dijo que la detenida apuñaló cinco veces en el pecho a la víctima. Al ver que su mamá no moría, llamó a una para consumar el crimen. Tras intentar asfixiarla con una almohada, la homicida apuñaló en 27 ocasiones a su madre ocasionándole la muerte. Posteriormente pusieron el cuerpo en una camioneta y la abandonaron en un lote baldío de la capital.
La fiscalía general del Estado de Nayarit aseguró que buscaría la pena máxima de 50 años para las autoras materiales del crimen. Y fue hasta este 25 de septiembre del 2022 que se condenó a Venus María “N” por el delito de homicidio calificado con una sentencia de 50 años de prisión y además tendrá que pagar 145 mil 710 pesos por concepto de reparación del daño.
La sentenciada presentó recurso de apelación para la revisión de la condena.