Redacción Sentido Común
La suspensión que el Gobierno de Estados Unidos impuso a las importaciones de aguacate mexicano se ha convertido en una gran problemática ya que el 81% de las exportaciones de esta fruta se destinan a Estados Unidos, su principal socio comercial y el mercado más grande del planeta.
Las exportaciones al país vecino generaron más de 2 mil 800 millones de dólares lo cual se traduce a unos 300 mil empleos directos e indirectos, según datos de la firma Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
“Este es un serio problema porque es un producto perecedero”, explica Juan Carlos Anaya, director de GCMA. En promedio, dice Anaya, se producen entre 100 mil y 130 mil toneladas de aguacate diariamente que ahora deberán venderse a un menor precio en el mercado nacional o a otro país.