Redacción Sentido Común
Especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) confirmaron que la degradación inducida por el ser humano afecta considerablemente a los arrecifes coralinos, uno de los ecosistemas más diversos, complejos y frágiles de la Tierra.
Debido a ello, Rodolfo Silva Casarín, investigador del Instituto de Ingeniería (II) de la UNAM, y sus estudiantes, simulan en el laboratorio algunos procesos hidrodinámicos para ayudar a su restauración.
El investigador detalló que cuando los arrecifes son dañados por el encallamiento de una embarcación o por una enfermedad y no han llegado a punto de destrucción de no retorno, se pueden hacer labores de restauración biológica.
“En el laboratorio del II utilizamos instalaciones en donde se reproduce la dinámica del sedimento de los arrecifes y todas las propiedades físicas que están en torno a él, la resistencia que tiene el arrecife al choque de las olas del mar. En un canal de 20 metros de largo generamos oleaje y viento en condiciones controladas, y podemos ver el efecto de un huracán en el agua”, comentó.